Cork Passion
CORKTANSA | NUESTROS VALORES
NUESTROS VALORES
Creemos en el corcho, creemos en la naturaleza
Creemos que el tapón de corcho es el único tapón para la industria vitivinícola que es, al mismo tiempo, un producto de origen 100% natural, reciclable, biodegradable y cuya industria es la principal responsable, directa e indirectamente, por la conservación y mantenimiento no solamente del vino, sino de los bosques autóctones y la fauna y flora autóctona de los alcornocales peninsulares.


Creemos en la Naturaleza y la Tradición
La exploración del corcho preserva no solo las especies autóctonas que dependen de los alcornocales, sino toda una economía local, trabajos y tradiciones en riesgo de desaparecer. Sea en el centro y sur de Portugal y España, donde se concentran los alcornocales y persisten los recolectores de corcho, o en el norte de Portugal, donde se concentra la mayor parte de la industria del corcho en el mundo, siguen vivas las profesiones de cortadores, operadores de perforación de corcho, recolectores, entre muchas más, gracias a la exploración del corcho para la fabricación de tapones, que sigue manteniendo todo un sector industrial al que se dedican miles de trabajadores.
Creemos en el futuro
Debemos asumir la responsabilidad de hacer nuestra parte para dejar un mundo habitable para las generaciones futuras. Defendemos la exploración del corcho, que no solo no requiere la tala del alcornoque, que es el árbol que lo produce, sino permite que el árbol viva más sano y por más tiempo. La “saca” del corcho – que es la corteza del alcornoque, encuanto permite un aprovechamiento económico de este recurso natural, limpia el árbol, liberándolo de parásitos y estimulando su renovación. Además, la producción de tapones de corcho deja una huella mínima en el medio ambiente en comparación con otras alternativas. No requiere la exploración de minerales, no utiliza plástico y no conduce a la deforestación para la siembra de cultivos utilizados en la extracción de polímeros derivados de plantas, utilizados en la fabricación de cierres alternativos de origen natural. Al utilizar un tapón de corcho, está contribuyendo al mantenimiento de los bosques autóctonos del sur de la Península Ibérica y del Mediterráneo.


Cero desperdicio
Sea en la fabricación de tapones alternativos de corcho, o utilizando residuos de la industria del corcho, como el aislamiento térmico y acústico o su uso en parques infantiles, entre muchos otros, el corcho es un producto natural que produce tendencialmente cero residuos.
EL TAPÓN DE CORCHO
Es el cierre que la naturaleza hizo para el vino.
El tapón de corcho es extremadamente ligero, ya que sus células están compuestas principalmente de aire (alrededor del 90%). Es flexible, maleable a la hora de taponar y de abrir la botella. Es elástico, volviendo a su forma original después de sacarle de la botella, siendo el cierre más adaptable a la forma interna de la botella y así asegurando su correcto sellado. Es impermeable y resistente a la humedad y a la interferencia de otros gases, al mismo tiempo que permite la micro oxigenación de la botella a través del aire presente en sus propias celdas.


Es el único tapón para vino con resultados comprobados durante siglos.
La mayor prueba de su valor es que sigue siendo la opción número uno para más del 70 por ciento de los productores a nivel mundial, especialmente en el segmento de vinos Premium, a pesar del elevado número de cierres alternativos que ofrece el mercado actual. El tapón de corcho natural puede conservar el vino durante varias décadas o incluso superar la cifra de un siglo, como ejemplifican algunas botellas de vinos de Porto, ablandando y envejeciendo al vino de forma natural y ayudando a crear vinos sublimes, con características únicas.
El tapón de corcho es seguro
El tapón de corcho ofrece, al día de hoy, garantías de calidad inigualables. Incluso el viejo enemigo del corcho, el 2,4,6-tricloroanisol o TCA, es cada vez más una cosa del pasado. La demanda cada vez mayor en la selección de materias primas, junto con innovadores procesos de desinfección y control de calidad, hace que, en la actualidad, se produzcan casos de contaminación de la botella por el compuesto que da el desagradable sabor al cartón mojado al vino, más pequeño y más despreciable.
